Sant Jordi 2024 en Salou

A poco de instalarme en Salou,  a finales de enero, recibí un whatsapp del periodista y escritor Ángel Gómez, invitándome a la “Asociación Ôra Marítima». Ha reunido a los escritores locales y una de las primeras actividades en las que participo, es esta estupenda idea que lleva a cabo «Shopping Salou». Los escaparates literarios, independientemente de si el comercio se dedica a los libros.

Exponen mi libro en el establecimiento FERNAN’S (Fotografía y Perfumería) y en ESCOLA INNOVA. Estoy contenta, y agradecida a todas las personas y entidades que lo han hecho posible. Felicito a todos los autores por esta promoción.

Causas ajenas a mi voluntad, me impidieron estar presente en el puesto de la “Asociación Ôra Marítima» el día 23 de abril. La foto con la rosa es un detalle de mi hermano.

Las memorias de Ricardo Ardèvol

(Todas las fotografías y programas originales de mi propiedad, que aparecen en este blog, han sido o serán donados futuramente a 2 instituciones municipales, artísticas e históricas de Barcelona)

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Ayer estuvimos en la sede de SGAE, Barcelona en la presentación del libro «Memòries de Ricardo Ardèvol Llorens». La meva vida amb els artistes, escrito por Ricard Ardévol Comelles.  

El aforo de la sala Mompou estaba lleno y seguramente había más personas relacionadas con el espectáculo. Se palpaba afecto y emotividad por parte de todos. Entre el público asistente estaban: Llorens el entrañable encargado del equipo de luz y sonido y su esposa; Lita Claver “La Maña” y Manuel Castán los dos artistas muy apreciados;  Natalia la hija de Lita y Joan Estrada a quienes tenía ganas de conocer; Joan Manuel Serrat, Silvia Dasca y Paco Pamies.

Durante el desarrollo de la presentación me gustó la expresión sincera de Joan Pera, sobre el espectáculo y lo que se considera “cultura” aportando además su vivencia anecdótica y familiar a lo largo de los años con Ricardo, padre D.E.P. Aprecié la corta conversación con Joan Pera al final. Cualquier cosa que explicara Ricard, visiblemente feliz por culminar esta obra, es pura historia del espectáculo con su padre. Albert Turró moderó con cercanía y complicidad, todo fue muy agradable. Valioso.

Hubo momentos de poemas recitados que daban lugar a más comentarios con el público. De aplausos. De explicaciones de un mundo artístico, del que me siento privilegiada por haberlo vivido y absolutamente desconocido en el presente sobre el camino escogido y abierto por Ricardo Ardévol, precisamente en Catalunya y que traspasa con su profesión lo meramente autonómico para convertirse en un bien nacional.

Y quiero contar mi paso por esta empresa, conocida con “ERA Produccions” que tan buenos recuerdos y experiencias en el ejercicio de esta profesión, me ha dado.

Con Ricard Ardèvol Comelles.
Albert Turró, Ricard Ardèvol y Joan Pera.
Página 176 Memòries de Ricardo Ardèvol Llorens

Corría el año 1977 cuando en la academia E.B.I.M. de la calle Cantabria nº 64, en Sant Marti, las alumnas más mayores tuvimos la ocasión de examinarnos para obtener el carnet rosa del Sindicato y poder trabajar. Yo era la única menor, y mi padre firmó con el juez una autorización para actuar puntualmente de noche. Provistas del carnet obligatorio, y con 5 bailes de repertorio, después de hacer muchas galas gratuitas y amateurs nos contrataron en la empresa del señor Ardèvol.

Tal y como dije ayer cuando nos pasaron el micrófono: “Posiblemente la mayoría de ustedes se acuerde de su primer sueldo”.  

El mío, lo gané bailando en un espectáculo de Fiesta Mayor, con este gran representante, algunos artistas muy famosos y mis compañeras. Salir de bolo, cuando nos citaban en el bar Manhattan de la calle Conde Borrell, para viajar en varios coches, actuar y volver con un sueldo de unas 3.000 a 3.500 pesetas y con las fotos autografiadas de los artistas, era toda una novedad en la vida de aquellas bailarinas noveles del barrio.

Algunos de los artistas con los que compartimos coche y camerino eran: Ramon Calduch, Josep Guardiola, los hermanos Calatrava, que entonces iban acompañados de la espectacular Toni (modelo de foto-novela), Santi Sans, Víctor Balaguer, Chantal y Loren, Brusi & Fredy, Marta & Chekis, Alicia de Alzaga, Carmina Serra, Rudy Ventura, Los Bernal’s, Olga Vidalia, Mercedes Ruiz, Pepe da Rosa, Mary Santpere, Luis Aguilé, Ana Kiro y Ondina.

Martay Chekis, cantaban: ¿están de acuerdo?, y el público coreaba ¡sí señor!

Este programa de la Festa Major de Puigreig, da una idea de los elencos de la época, al igual que esta parte de un poster doblado que conservo, de la Festa de Santa Coloma de Farners.

Más información detallada en esta entrada imprescindible para comprender el trayecto artístico desde Sant Martí, Barcelona.

Programa de la Festa Major de Puigreig en 1977 o 1978.
Poster Festa de Santa Coloma de Farners 1977-78 – foto grupo Condal Ballet, estoy en el lado derecho arriba. Los artistas en el poster: – Los Bernal’s – Isa Moren & Nando Buzzi- Carmina Serra, vedette.

La última vez que ví a Ricardo Ardèvol junto al también rapsoda Ricardo Navarridas, conocido en aquellos tiempos de descubrimiento de vocación en el Club Amigó, fue en un acto homenaje póstumo a Ramón Calduch y Josep Guardiola realizado en una sala de un centro social en el Paralelo «La casa del Mar». Debía ser en 2013 no estoy segura. Me acompañaban Mel Castán y Chemy de Saa.

Ardèvol mantenía aquel dominio con el micrófono. Me conmovió cómo habíamos llegado a coincidir de nuevo,con ese sentimiento del transcurrir del tiempo, de tantas experiencias y le regalé esta foto. Qué bonito, recibir un sueldo bailando cuando todo el mundo decía que aquello no era un trabajo y que no tenía futuro, no el trabajo… yo.

Soy la segunda por la izquierda de rosa. Condal Ballet de Isa Moren, 1977-78 de Sant Martí, cuando actuábamos en los espectáculos de Ricardo Ardèvol, foto en el Parque de Atracciones de Montjuic.

Mi determinación y el destino me llevaron con billete de ida y vuelta, pues de eso se trata “las vueltas dan mucha vida”, a diferentes compañías, empresas y espectáculos, haciéndome la bailarina y coreógrafa profesional, responsable, entregada que afirmo ser (ni peor ni mejor) y así en 1991 y 1992 volví a ERA Produccions con mi Ballet Elite’s Show a la vez que estábamos durante 53 programas en «Això és massa» deTV3. Me encontré con aquellos artistas de los inicios y conocí a otros, compartiendo aquellos bolos de variedades en toda Catalunya que comenzaban a las 4 de la tarde saliendo de casa, con una única función generalmente y regresando a las 6 de la madrugada. En otra entrada del blog cuento la anécdota con Lita Claver, con un gesto de buena compañera aunque no me conociera personalmente, en 1990.

En el centro. Ballet Elite’s Show, creado en «La Palmera» de Sant Martí. «Galas», Salou 1991 ( Restaurante-Espectáculo al estilo «Las Vegas/Scala Barcelona»).

Posteriormente, en 1995 regresé al Paralelo 10 años después de dejarlo, con los queridos Hermanos Calatrava al teatro Arnau con “La Creación” y en verano a aquellos bolos de siempre, con el también querido Joan Gimeno con “Humor a primera vista”.  Yo ya vivía en Salou. Como muestra de la calidad empresarial y humana aquí esta nota, la única recibida en toda la vida artística en España por parte de un representante. Por eso y otros detalles puedo decir que son los mejores.

Con los Calatrava en el teatro Arnau 1995, Ballet Elite’s Show, segunda generación.
Nota de agradecimiento de los Calatrava, ERA Produccions y Ricard Ardèvol.
Publicidad Teatre Arnau «LA CREACIÓN» 1995 ERA Produccions.
Programa «HUMOR A PRIMERA VISTA» ERA Produccions 1995.

Más tarde en 2001 Ricard me propuso participar con mi ballet en la I Gala dels Premis A.R.C. Associació de Representants de Catalunya, realizada en Scenic (anterior Teatro Español, Studio 54 y posterior Arteria y Barts), transmitida por TVE. Llevé a mis alumnas mayores de Escola Carol Dansa Salou, que fueron las primeras de Tarragona en hacerse artistas profesionales en 1999 a base de patear escenarios, como había hecho yo. Los créditos constan en el vídeo. Dos de ellas siguen en esta profesión.

En 2002 hice unos últimos bolos con ERA Produccions. Entonces; Ardèvol padre fue el primer representante y Ardèvol hijo, el último con los que trabajé.

Finalmente ya que marché a Turquía, abandonando todo entusiasmo por producir en mi propia tierra y después de ser la primera titular catalana/española como coreógrafa del ballet internacional (propio) en el Restaurante-Espectáculo “Galas” Salou por 3 años y de tener 2 ballets en la Costa Daurada para la programación hotelera a diario en temporada de 4-6 meses, durante años, Ricard me certificó ante notario una preciosa carta de “bon service”, una exigencia para obtener el visado de residencia y trabajo en aquel país donde pasé una gran etapa creativa como coreógrafa y directora artística en MNG Holding «World of Wonders» hotels & resorts 5*, viviendo ajena a todo esto durante 26 meses.

Cuando regresé a España, el espectáculo estaba peor. Una mañana en la oficina de la Avenida del Portal de l’Àngel, Ricard me contó las claves del panorama con una franqueza necesaria, pues los amigos te dicen lo que necesitas escuchar y no lo que quieres oír. Realmente aquellos gloriosos bolos de verano habían casi desaparecido. Su análisis, certero, me dio una medida que todavía hoy me permite no perder la perspectiva sobre el espectáculo popular y los cambios tanto políticos como de público que hacían necesaria una evolución. No es que necesitara trabajar en ello, y menos desesperadamente. Estaba tan cansada, que a pesar de tener un buen contrato en una empresa turística importante, mientras me llamaban para volver a Turquía algunos compañeros jefes de animación para ir a otras compañías y a la vez rechazaba trabajar como directora artística en una línea de 5 cruceros fui situándome en esa realidad local. No iba a abandonar mi casa y mi matrimonio con una persona que me ama y apoya pero que no comparte mi pasión por al espectáculo, cumplidos los 45 años, con el mismo ansia de aventura que a los 20 años. No tengo sentido del arraigo, pero me tocaba quedarme aquí.

Seguí haciendo cosas de pequeño formato, proyectos motivadores en Cambrils, Tarragona con un grupo de 9 profesionales en 2009 aunque no pudieron continuar por las distintas expectativas personales y laborales; cambios de residencia, de trabajo fijo, embarazos… y estudios. Posteriormente creé “Les girls”que hicieron algunos shows benéficos y también profesionales en Barcelona, aunque estaban en edad de estudiar, con mis expectativas claras: ni iba a volver a los hoteles que no habían mejorado nada las condiciones de trabajo ni seguridad ni podía arriesgarme en producciones en Barcelona que no me garantizaban unos mínimos porque todo el sistema se había desmoronado y nada me resultaba atrayente. De nuevo surgió otra posibilidad de montar en cruceros, asociada a un productor, y me di cuenta de que esa “vuelta” no era para mi vida. No me preocupa la soledad pero hay mucha en la vida personal cuando se apagan las luces del escenario. Otra vez, maletas. Otra lucha. Otras motivación.

En esta profesión sí que tenía futuro, pero nadie sabe cuánto dura «siempre».

Bailar y trabajar en el espectáculo comercial, es una decisión vital tan apasionante como sorprendente y la vida me ha realizado más sueños de los que tuvo la Carolina de los 17 años.

Con Lita Claver y Manuel Castán, grandes artistas y amigos queridos.

Regresando al legado de E.R.A. Produccions, tanto de Ricardo como de Ricard, la palabra es; Confianza.

No dudabas de si ibas a cobrar. Nadie daría rienda suelta a la “mano negra” u ocultaría un acoso. Sin engaños. Sin cosas raras. Un respeto y una simpatía. Hacer las cosas bien. La corrección o formalidad recíproca. Eso no lo he conocido en otras empresas y, como aquí no hay feria pero si hay bolo, cada una “cuenta el bolo” como le va.

Es inútil remarcar que un empresario sabe lo que contrata y un artista sabe en qué manos deposita su trabajo. No, esperanza no. Hay duro trabajo y mucha incertidumbre durante el camino artístico. La elegancia se prodiga poco en el espectáculo más popular, pues bien, esa distinción siempre irá unida a esta familia de representantes y managers con quienes trabajé en las mejores condiciones aunque a veces los escenarios efímeros fueran carpas de Fiesta Mayor con sillas plegables y un solo decorado de fondo.

Esta profesión también me ha demostrado, cruda y también exquisitamente, que la categoría no está en el lugar donde se trabaja sino con quién. Por ello cuando me asalta un impulso creativo todavía llamo a Ricard, para consultarle su parecer, la última vez en 2017.

Con los Ardèvol, padre e hijo, mi ballet Elite’s Show, Ángel Amar y yo, tuvimos esa gran suerte. Esa dignificación del artista que «aunque haga reír» según palabras muy descriptivas de Joan Pera sobre el nivel de la mentalidad del contratante, o baile, haga acrobacias, cante… y todo ese abanico de talento personal, también contribuye a la cultura.

Felicidades por este libro «Memòries de Ricardo Ardèvol Llorens», La meva vida amb els artistes, Ricard. Un libro necesario que alumbrará la ignorancia de muchos y dará ese impagable brillo, ese empujón de honestidad, al alma de los que saben, no olvidan, no se confunden y no se conforman con que las cosas vayan a menos.

Mi afecto sincero, con la gratitud por esos años donde sin ser funambulista, hice saltos sin red, (como siempre) que salieron bien. Muchas gracias por la dedicatoria, la personal y la del libro; A la madre ausente, de Irene, Ricard y Maite. Acto que aplaudo, ya en casa, íntimamente y con el que me identifico pues como con mi libro y mi madre, no se lo hemos podido entregar, para honrarlas y darles ese merecido homenaje a toda una vida de dedicación, amor y valores.

No se me escapó ese aplauso a las alturas, de Ricard. No solamente por que estaba la pantalla con la imagen de su padre. No tengo duda de que también hay «un cielo de los artistas».

Invitación de la presentación del libro.

Chen, plumas, tetas y variedades sentenciadas

(Todas las fotografías y programas originales de mi propiedad, que aparecen en este blog, han sido o serán donados futuramente a 2 instituciones municipales, artísticas e históricas de Barcelona)

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Ayer ví CHEN, «el cabaret de los pobres», que está disponible en RTVE Play.

Manolita Chen y su teatro chino, es un documental que refleja la historia de muchos artistas. Nuestras vivencias laborales son paralelas en cierta época y lugares comunes pero hemos pasado por realidades distintas. Este tipo de vida de portátil y de estructura de espectáculo de varietés no tiene nada que ver conmigo. Como tampoco lo tiene «El Molino» por mucho que las compañeras que han trabajado allí hayan sido mujeres modernas, profesionales y decentes como la que más. No hubiera realizado mi profesión así, en un portátil ni por dinero ni por ilusión. Digamos que «vivir en una caravana» para ahorrar o dormir en el autocar por tener que cruzar el país en unas horas justas para llegar a la siguiente función, no compensa, la juventud lo permite pero la madurez lo paga. Claro que he dormido en autocar, y viajado en día libre que está prohibido según los convenios, pues siempre hay un empresario dispuesto a hacer doble caja con las debilidades profesionales, no reguladas y silenciadas, de los artistas.

Algunos comentarios en el documental señalan al fin de la dictadura y al destape como muerte de la revista… incluso se afirma que el destape fue la puerta de entrada de los intrusos. Estos, los malos artistas han existido siempre. Ahora, pregunto por aquellos vendedores de playbacks en cinta “open reel” de gran magnetófono, que enseñaban a hacer striptease a chicas sin oficio ni beneficio, sin más futuro que aprovechar el tirón con un cuerpo bonito. Tantas, distraídas con cantos de sirenas, otras llevadas a negocios más lucrativos… y alguna, afianzando un buen matrimonio o cambiando de vida, una de día y luz a golpe de despertador, con horario establecido y sueldo seguro. Yo no juzgo a nadie, cada peseta ganada en las sombras de una profesión sin garantías y que a nadie importó fue bien ganada.

Las varietés y sus circunstancias; en el documental surge la idea de que la televisión era el mal de todo espectáculo en directo. Era también el perenne lamento y la justificación por la falta de audiencia del empresario Matias Yáñez “Colsada” en los años 80, en definitiva: la decadencia del género. Este empresario que tenía la sartén por el mango no hizo nada más que quejarse, obligar a los bailarines a cargar y descargar los camiones con los decorados y baúles de vestuario, permitir comisiones a costa de bailarinas principiantes y también menores de edad que venían de Inglaterra ( como otros) y atesorar propiedades, en lugar de modernizar su parcela de la Avenida del Paral.lel.

Luego está el tema de las coristas; excepto Isabel Serrano, actriz, que conocí en persona como buena bailarina, relatando la dinámica de la gira, en este documental se ven chicas y señoras que «se movían» pero se nota que no hicieron una clase de danza en su vida. Pasearse en la pasarela y disfrazarse acorde con la temática de los números, está muy lejos de una corista profesional capaz de bailar todo. Hay mucha barra de ballet y dinero gastado para aprender a bailar.

Otro mal que se presenta en el documental es el «topless», con la competencia y la necesidad de adaptarse. Bueno, ya se hizo en Europa mucho antes del auge del destape español, y por poner un ejemplo concreto Margaret Kelly “Miss Bluebell” lo instauró como parte del atractivo de las “Bluebell girls” en el París de 1970. Algún día tenia que cruzar la frontera bajo el pretexto de la apertura política aunque fuera en función de tarde y no en un cabaret debidamente calificado. Mostrar las tetas (en un contexto elegante) como saber llevar las plumas son los talentos de las criaturas inalcanzables en los escenarios próximos.

Llevar carne fresca a las ferias municipales a razón de 7 funciones diarias, es algo que no entra en mis estándares de espectáculo. No me salen las cuentas de las horas de una jornada laboral, (maquillarse, vestirse y recoger también es trabajo) así que suena más a explotación. Por muy bien que pagase Manolita, haciendo del ansia y la oportunidad el pretexto de tantos y tantos trabajadores, los más beneficiados fueron como en todos los teatros portátiles, los llamados “cabezas de cartel” o primeras figuras y los empresarios.

A Manolita Chen le reconocen mucho mérito como artista y como empresaria, quienes más interesados están en preservar esa crónica de una España comida, bebida y reída en las ferias, con sketches y situaciones «a la carta» del proletariado, su ávido consumidor. Claro que se usaba a las mujeres con humor de dudoso gusto y estética que rozaba lo sórdido, cosa que hará menear la cabeza y repartir opiniones que rayan la denostación a todas estas feministas dispuestas a derribar a otra mujer por ser libre de elegir lo que hacer sobre un escenario.

Yo no fabulo. No invento y no me confundo. Ya sabéis que, por lo general, escribo sobre lo que vivo en primera persona, es mi memoria, mi experiencia y me pertenece.

Conocía a Paco y Reme que cuentan su historia en el documental y que antes se hicieron llamar Franky y Mary «Dúo español» desde Sant Martí, Barcelona entre los años 1975 y 1977 aproximadamente. Actué con ellos en varias ocasiones y gratis, para “hacer o coger tablas”, como componente del Ballet de Isa Moren, que también aparece en la foto, yo estoy detrás bajo la letra M, en lugares como el “Niu d’art Club Amigó” en Barcelona.

En esos años, la academia de ballet estaba situada en la calle Cantabria nº64 y la dirigía el padrino artístico de Isa Moren, así lo presentaba ella misma. Era un aristócrata de Barcelona llamado J. Figueras J. Este individuo, con un carácter atormentado, irascible y muy violento, le había costeado sus estudios desde niña e invertido en la academia y no tenía ni idea de danza ni de pedagogía. Ambos nos llenaban la cabeza con ideas de éxito y sacrificio total en pro de la danza, básicamente nos tenían engañadas con promesas incumplidas y garantías de calidad que brillaban por su ausencia. «El director» vivía también, de algunos negocios industriales y cobraba por haber repatentado un famoso invento de Alejandro Finisterre aprovechando que estaba exiliado y que llegó a atribuirse como suyo; el futbolín.

Además en los años 80, Figueras se hizo famoso en la prensa nacional por querer demandar a RTVE, ya que en su juventud había estado vinculado a unos hechos trágicos, y se veía identificado en un episodio de la serie «La huella del crimen», dirigida por Pedro Costa. Esta información está en la Hemeroteca. RTVE se vio obligada a cambiar el nombre de este individuo, para garantizar que la demanda no fuera a más.

«Paco y Reme» el «DÚO ESPAÑOL» del Teatro Chino de Manolita Chen, con el Ballet de Isa Moren, en el Club Amigó 1978 (Foto Audenis).
«Paco y Reme» el «DÚO ESPAÑOL» en el documental «CHEN», 2012 RTVE.

Una de las particularidades de bailar con este grupo «El Ballet de Isa Moren», también llamado «Ballet de cámara de Barcelona» y «Condal Ballet», fue la de tener que pagarse cada una sus trajes y zapatos. Bajo la responsabilidad de estos tutores artísticos, sufrimos diversas amenazas si no acudíamos a algún bolo que nuestros padres no consideraban adecuado, como por ejemplo tener que compartir el escenario con la actuación de chicas strippers en la discoteca Tuthankamen en Castelldefels.

No había nada más que pudieran ofrecernos en la academia, a 3.500 pesetas mensuales (21 €), tomando 2 clases semanales de ballet, otras tantas de español, ensayando sábados y domingos. Nada más que las varietés de verano. Y de este grupo solamente yo, perseveré.

Número moderno «Shaft», Ballet de Isa Moren 1978, en el Club Amigó (Foto Audenis).

Nosotras, las seis chicas más mayores, (en la foto de moderno, morena, estoy detrás a la derecha) fuimos las precursoras del “Petit Ballet de Barcelona”. Con esta generación comenzó el pisar el escenario, aunque con notables carencias.

Debido a sus considerables disputas y un ambiente nada educativo que relato fielmente en mi libro, las alumnas abandonamos la academia y a Figueras, marchando con Isa Moren al local donde daba clases de música la entrañable señora Ana Cuadrat, en la calle Mogent muy cerca de la Rambla de Prim. Posteriormente, por consejo y gracias a la directa intervención de la familia de la pequeña alumna Ángels Oliva, llegamos a la AA VV Sant Martí de Provençals que ya gestionaba el edificio Gaudí, actual Centre Cívic Sant Martí, siendo su presidente Manuel Martínez.

Cuando las primeras compañeras de mis inicios académico-faranduleros, (ver este enlace que amplía la historia) desaparecieron en busca de su futuro inminente ya fuese laboral o familiar, me quedé como la más mayor con 18 años junto a dos compañeras; Gina y Elisa Mª. Todas las demás chicas tenían entre 7 y 16 años. Entonces todavía nos llamábamos «S’Condal Ballet». Puntualmente se sumaron otros tres; Montse, Maite y Primitivo, un chico que conocí en las tardes de la discoteca Camelot, mayores de edad, aunque ya como profesionales hicimos pocas galas.

«A Fifth of Beethoven» – Coreografía de Carolina Figueras Pijuán – S’Condal Ballet de Isa Moren – 1979 en Institut Joan d’Àustria actual «Auditori de Sant Martí» (Foto Audenis)

Hice coreografías, compuse vestuarios completos y enseñé a las chicas a maquillarse, según consta en muchos programas de mano hasta el año 1981.

Programa de mano de S’Condal Ballet de Isa Moren – 1979-80

En junio del año 1981 mi coreografía «Tico-Tico» nos colocó junto a un fragmento de «El lago de los cisnes» obra de la profesora titular, en 2º lugar/premio en el programa concurso de TVE “Gente Joven”. Parte de mis números, hechos con tanta ilusión, se utilizaron en aquellos tiempos de actuaciones para Hogares de Ancianos; la Maternidad; el mencionado Club Amigó; la discoteca Camelot y el Salón de la Infancia y la Juventud. Muchas actuaciones en el teatro del Instituto Juan de Austria que ahora es «Auditori de Sant Martí» y otras en el teatro de «La formiga martinenca». Además hicimos matinales en el restaurante-espectáculo Caesars’s en la Torre Catalunya, el anfiteatro del Parque de Atracciones de Montjuic y algunos fines de fiesta de las revistas de Sara Montiel en el teatro Victoria.

S’Condal Ballet de Isa Moren / Petit Ballet de Barcelona – Ensayo para el concurso «GENTE JOVEN» RTVE, 1981. Escola de dansa de Isa Moren en la calle Agricultura, Sant Martí.

Estuvimos trabajando a diario en la Sala de Fiestas «Savoy» de Palamós durante el verano de 1981, como «S’Condal Ballet», con 3 compañeras menores y Nando Buzi, un tipo de nulo talento artístico.

Programa y Publi de la Sala de Fiestas «Savoy» de Palamós – S’Condal Ballet de Isa Moren 1981. En la foto de izquierda a derecha en el trío de niñas con bastones; Rosa M., Esther L. y Carmen S. Diseño vestuario y coreografía de Carolina Figueras Pijuán. En la foto acrobática la niña María José I. y Nando Buzi.
Petit Ballet de Barcelona – 1981, Sant Martí (Foto Lorenzo Fuentes). Al final de la página pongo el resto del programa de mano, por si alguna estimada compañera no lo tiene.

Estoy en esta foto mural que muchas personas de Sant Martí reconocen, (en el centro con cabello corto), durante muchos años «marca de la casa» y que está incluida en el libro del Aniversario de la «AA VV Sant Martí de Provençals».

Cuando comencé a actuar era menor, lo hice expresamente con un permiso paterno validado por un juez, para actos puntuales pero de ninguna manera estaba permitido trabajar a diario. La ley obligaba a tener 18 años cumplidos para hacer espectáculos y trabajar de noche a diario y sigue vigente en 2023.

Después de casi 9 años estudiando y por las circunstancias violentas que aceleraron mi desaparición de la escuela de danza, previa denuncia con parte médico en el Puesto de la Guardia Civil de Palamós, por agresión física (no sexual) de N.B., siendo componente del Ballet S’Condal, totalmente desamparada y humillada ya que todos los adultos implicados en aquellos hechos me denegaron el auxilio, fui simplemente obligada a abandonar la escuela y el ballet. Para mayor vergüenza, la persona en quien más había confiado y más había sido ayudada por mi madre, por mi y por otras personas nobles y sencillas, estuvo dando unas explicaciones, justificando mi ausencia repentina, a cual más falsa como que estaba enferma, a mis compañeras y sus familias. Además, en un entorno vecinal tan pequeño hizo sufrir innecesariamente a mi familia con rumores sobre mi decencia cuando ya estaba dedicada al espectáculo en el Paralelo de Barcelona. No obstante, no guardé rencor y me porté como una amiga durante muchos años.

En septiembre, algunas de mis coreografías se aprovecharon para el invento de Colsada y Balaguer “La Olimpiada del Humor”, con el ballet infantil y juvenil “Pequeñas estrellas”. No sé cómo se lo montaron todos los implicados a base de chanchullos con «documentos firmados» por los padres, que tenían el mismo valor que los billetes del «Monopoly» en el maletín de la Señorita Pepis, para mantener en cartel el ballet de niñas terminando de actuar a las 2 de la madrugada en el «Savoy» de Palamós y para llevar al teatro una Revista con las «Pequeñas estrellas» que eran las mismas componentes menores del «Petit Ballet de Barcelona» y que aparecen en la foto superior, contando con el aval adulto, pues aquello no había por donde cogerlo, de Amparo Moreno; Jordi Vila; Goyito Ferrán; Kimbo y Jennifer Lee.

En ese momento ya estaba alejada de aquello, en la Revista de Colsada en gira, aunque era la creadora de un tercio del repertorio, especialmente el inicio «Tico-Tico» y el «Finalísimo Brasileño», incluyendo el diseño del vestuario. Los padres de una de las niñas tuvieron el detalle de regalarme una entrada para entrar a ver aquello a lo que dediqué muchos meses con sumo cariño y abnegación,sin imaginar que un día estaría en manos de los empresarios más poderosos de Barcelona, totalmente ninguneada y que no vería ni un duro.

Nunca he necesitado añadir mi experiencia profesional en la academia de ballet como monitora de jazz dance ni como coreógrafa del citado grupo a mi currículum. No existe. No merece mi crédito.

Al encontrarme absolutamente sola en la exploración de mis posibilidades artísticas y profesionales, empecé de cero y aprendí todo lo necesario para abrirme camino en la danza y el espectáculo con otros profesores que adoro como Máximo Hita, Poppy Scott y Betty Brown en el famoso «Cadaqués Center» de la calle Madrazo. Conocí la base y la verdad de este oficio en el teatro, cobrando, trabajando con ilusión y pasión, aprendiendo con los coreógrafos y compañeros bailarines más profesionales que yo.

Ahí queda en los programas de mano y carteles de actos pasados un testimonio indiscutible; el paso de mi madre confeccionando el vestuario y mi apasionado trabajo creativo.

Elenco de «LA OLIMPIADA DEL HUMOR» 1981 – Petit Ballet de Barcelona / Pequeñas estrellas – Empresa Colsada-Balaguer, teatro Victoria. Todo el vestuario del ballet (visible), diseñado por Carolina Figueras Pijuán y confeccionado por Pilar Pijuán Alcázar.
Propaganda «LA OLIMPIADA DEL HUMOR» Petit Ballet de Barcelona / Pequeñas estrellas con Colsada-Balaguer 1981, Teatro Victoria.

Incluyo aquí el recorte de prensa de La Vanguardia, 5 de septiembre por J.S. que «salva» uno de mis números más repetidos, aprovechados en mi ausencia y que dice así: “Pero atención, la sorpresa de la noche viene dada por un ballet infantil. No habrá quien piense en un final de curso de escuela. Con un acierto infinito, de modo especial en el brasileño apoteosis en el que, bajando al patio de butacas, llevan o intentan llevarse al respetable a compartir la escena. Suyo es el triunfo de la nueva opción de la noche barcelonesa”.

Crítica de «LA OLIMPIADA DEL HUMOR» 1981 – Pequeñas Estrellas / Petit Ballet de Barcelona. La Vanguardia.

Volviendo al Teatro Chino de Manolina Chen. La última vez que coincidí con Paco y Reme, posiblemente en el año 1983, me los encontré en el Paralelo y les iba muy bien. Eran buena gente, currantes como lo hemos sido la mayoría.

Tengo compañeras bailarinas/coristas, de sólida formación artística que han trabajado en portátiles y han hecho más de 3 funciones diarias. Yo lo hice solamente una semana, acompañando a los Hermanos Calatrava como showgirl de su repertorio, junto a Esther G., participando en la presentación y final del ballet, con una producción de Juan Ruiz para los Pilares en Zaragoza y dije que nunca más… eso durmiendo en el Hotel Corona de Aragón, a un precio prohibitivo pero necesario para mi salud y no en una caravana en pleno meollo de la escandalera de la feria, con las bocinas de las atracciones y los altavoces de los feriantes en cada uno de los puestos. Ya había pasado anteriormente por las dos funciones y la “golfa” de los sábados en el Apolo de Barcelona con Colsada en 1985 y me resultaba insoportable retocar el maquillaje e iniciar la tercera función, así con un entusiasmo fingido y encima para dar ejemplo como capitana del ballet, por mucho que amase mi profesión y me pagaran un extra. Por cierto, en aquella época estaba de vedette en el Arnau, la actriz Neus Asensi.

Luego existe esa leyenda de la familia feliz, que no lo es, en el teatro. Esa íntima reflexión que muchos compañeros se hacen, con el balance de tantos momentos maravillosos y las putadas que todos tuvimos que aguantar. No, no lo hacíamos por sobrevivir, pues teníamos recursos para mejorar nuestras vidas si de verdad quisiéramos abandonar. La cabra tira al monte, es un impulso superior al entendimiento. Lo hicimos porque la inversión en aprender esta profesión no podía irse por el desagüe de la decepción con alguna mala experiencia. Eso pasa en todos los trabajos y ámbitos.

En cuanto a los lectores del “Club del pensamiento positivo”, que se quedan con lo bueno, solamente digo que lo que te enseña y curte, lo que te diferencia de los demás conlleva algo negativo, por lo que lloraste o hicieron daño a tu familia, es un peaje ineludible. Lo refiero cuando me hacen entrevistas: “es mi viaje desde la inocencia hasta la experiencia”, desde el tutú y los bolos de principiante, hasta el descubrimiento de la mujer de espectáculo con los tacones de 8 centímetros y los biquinis de strass. Poder femenino y libertad.

Al teatro se va a luchar por uno mismo ya que es, de todos los lugares artísticos, el espacio que menos solidaridad alberga y donde más peligra tu puesto. Ese sustento nunca corresponde a lo que vales y quienes lo manejan lo saben. Te estafan la seguridad social; las horas de descanso; las dietas. Te quedas sin cenar o sin dormir… por una mala gestión, tienes que soportar el acoso y callar por mucho que protestes o cobras cheques sin fondos. Pero lo amas. Nunca miré hacia otro lado, quise aportar y hacerlo mejor para mis compañeros pero no tengo, aunque habría valido para ello con el apoyo adecuado, alma de mártir sindical. Así  que lo hice, doté de cierto bienestar a mi propio ballet que afortunadamente me salió humana y profesionalmente de lo mejor.

Abstención necesaria; es inútil aconsejar y opinar sobre lo que otro debería hacer o cómo podría afrontarlo cuando se está valorando si seguir o dejarlo.

El pasado no vuelve, siempre está ahí, aquí…como el presente. Es legítimo que exponga mi vida, mis fotos y mis recuerdos sin cortapisas ni sesgos a conveniencia de personas ajenas que nada saben, mucho juzgan y más tienen que callar. Y el caso es que todo fue obra del amor, a mí misma, al arte, al escenario y a los demás.

Manolita Chen, pertenece a ese pasado de las varietés, y ustedes me perdonarán… mejor que no se repita. Me conmueve, por ese sentimiento harto conocido de habernos jugado la vida en la carretera. Sinceramente, cansa, hasta pensarlo. Conozco compañeros que se quedaron en el camino sin tener derecho a jubilación ni a una vida digna, no digo rica, sin penurias cuando los focos se apagaron y el cuerpo ya perdió el turno de lucirse, la voz la fuerza de alegrar y el alma las ganas de soñar.

Quedan los concursos de talentos y los artistas serios, se van. Los entiendo.

Estuvo bien, fue fantástico pero yo no volvería.

Programa (cara exterior) Petit Ballet de Barcelona (foto Lorenzo Fuentes) alojado en 1980 en el «Edificio Gaudí»,con la AA VV Sant Martí. Actual Centre Cívic Sant Martí.
Programa (cara interior) Petit Ballet de Barcelona (foto Lorenzo Fuentes) alojado en 1980 en el «Edificio Gaudí», con la AA VV Sant Martí. Actual Centre Cívic Sant Martí.

REPERTORIO coreográfico, nunca remunerado, que creé con la complicidad de mis queridas compañeras y niñas, que aparece en estos programas:

Broadway Melody (Night & Day) – Petit Divertiment – Baúl clandestino – ¿Te quieres casar conmigo? – Festa Brasilera – Un día en cualquier lugar (+ libreto) – Signo Maléfico (sólo libreto, registrado).

Otros números que realicé y no constan: Tico-Tico – Mein herr, CabaretA Fifth of Beethoven Smoke gets in your eyes – La cumparsita – In the mood (para la orquesta del Colegio Alpe en Gente Joven RTVE) – Temas de los cantantes infantiles Zipi y Zape (Patxi y Luigi Valtuille).

GENTE JOVEN 1981 «Tico Tico» vídeo propiedad de Mónica Sentís.

Coreografía y diseño de vestuario, Carolina Figueras Pijuán. Al finalizar el vídeo doy el correspondiente crédito a mis compañeras. Algunas recuperadas con los años y gracias a las redes sociales, otras para siempre perdidas.

En TV3 treinta años después, gracias.

Aquí tenéis el emocionante e insospechado retorno a TV3 con un equipo de atención; recepción; producción y dirección con Albert Aguilera, «f-a-b-u-l-o-s-o» una calidez y profesionalidad digna de mención (no es un halago es una realidad).

Desde mi trabajo con mi ballet Elite’s Show, y con los estimados compañeros en el programa «Això és massa» hasta hoy, en «Tot es mou» con Helena García Melero, en un plató muy bonito, han pasado 30 años.

A Helena le llevé un programa de un evento en el que coincidimos una unica vez en la vida, “la II Gala de la Lliga contra el Cáncer de Comarques Tarragona” relacionado con el actual FUNCA, en la desaparecida Sala Galas en Salou. Helena tiene una gran proyección física, quiero decir que entiendo que se la considere cercana viéndola en la pantalla, pero es que en la distancia corta me parece además de muy profesional y dinámica, una mujer de gran fuerza.

También quiero agradecer a Mari Pau Huguet, a quien le llevé una página de prensa que compartimos con mi ballet también en “Galas” de Salou, de aquellos años (los 90) al cargo de la Atención a la Audiencia y a María José Pons las facilidades para llegar a realizar este programa que tanto me ha ilusionado y ha provocado preciosos recuerdos. Especialmente a mis queridos bailarines en esa época y amigos que saben lo mucho que he luchado para dignificar esta profesión.

Qué bonita experiencia.

Gracias, gracias, gracias.

Aquí, abajo, puedes acceder al Clip de TV3.

CLIP DEL PROGRAMA «TOT ES MOU» 24-2–2023 en TV3 a la carta «MEMORIAS DE UNA CORISTA».

Los libros se compran donde uno quiere

Me hubiera encantado ver mi libro en una librería o sección de libros, claro que sí. Pero si de algo me ha servido ser artista y productora de shows es, imaginación aparte, contemplar la realidad y valorar las posibilidades. Podemos querer a un espectáculo, una coreografía o un libro propio como a un hijo “creativo” pero no engañarnos. Los grandes nombres de la literatura tienen detrás una editorial que apuesta por ellos, un sistema de promoción y además escriben artículos o páginas en la prensa. Este libro no iba a hacerme rica, pero sobre todo no iba a envejecerme y desanimarme, yendo a “puerta fría” esperando la respuesta adecuada. Siempre digo que cada día “pasamos el casting”, todos. En el trabajo. Con las relaciones. En la sociedad y todos sabemos lo que significa no caer en gracia o que te subestimen en algun momento de nuestra existencia. Tenía una artrosis de cadera muy pesada, que me deshabilitaba y me robaba parte de la energía diaria.

Tengo que decir que cuando terminé de escribir esta historia basada en mi vida profesional, “ el viaje desde la inocencia a la experiencia” en el terreno del baile y el show comercial, estaba en pleno duelo por el fallecimiento de mi madre y publicarlo era la promesa que le hice 4 días antes de morir. Aunque leyó el borrador, capítulo a capítulo en la pantalla de su portátil, nunca ha podido ver la publicación. Esa es una espina, una tristeza, que como un clavo y por mucho que arranques de una pared, queda el agujero. Nada, ni con “aguaplast”, una cicatriz que me acompaña sin pensar en ello, forma parte del “viaje” pues la experiencia no ha terminado.

Por las “causalidades” extraordinarias, Javier Llanos director de teatro y del programa de radio “La gatera” de Canal Extremadura me puso en contacto con un editor. ¡Zas! Era demasiado bonito y de verdad. El editor me atendió muy bien y en aquellas fechas, tras enviarle el documento PDF, me emplazó para septiembre pues estaba con las ferias de libros y todo ese montaje que escapa de mí, ya bastante tengo con el engranaje del teatro y de la televisión, e incluso en eso es posible que me quede fuera por falta de práctica en los últimos años. Las cosas que yo viví ya no se hacen así. Tras las entonces denominadas “audiciones” me dijeron tres veces: “Ya te llamaremos” y ¡Oh cielos Oh!… me llamaron y nunca más tuve que pasar pruebas. Eso sí que era un “corta y pega”, vital, saltar de un trabajo a otro por la buena reputación.

Llegó septiembre y el editor, estaba ocupado en lo suyo. Me sentía incapaz de insistir y no dije nada más. Como tenia Amazon Prime, podía leer libros digitales de préstamo y cayó en mi tableta uno de Roberto Augusto, que cambiaría mis expectativas; con las pautas de la auto publicación en su plataforma.

Ya antes había explorado el poder publicar en esas editoriales donde te facilitan autoeditar 100, 300, 1000 libros y tenerlos en stock. De ninguna manera quería almacenar ni pasar por el proceso de vender uno a uno. Me hice con el programa de KDP, maqueté el libro y lo subí al servidor de Amazon. Un día, sin esperar la llamada del editor de Madrid,  movida por uno de esos impulsos como cuando producía mi «Ballet Elite’s Show» en Barcelona y «Carol & Co», en Salou en los años 90, le dí a la tecla y comenzó el proceso de “dar a luz”.

Mientras esto sucedía avisé al amable editor, disculpándome, diciéndole que no había sabido esperarle. Ni tampoco a una posible decepción que me venía bastante mal, pues tras mi madre, falleció “Droopy” nuestro perro. Escribir ya fue una catarsis, un ordenar las piezas sueltas del puzzle que en su momento no pude y me sentía en el precipicio emocional. Sería la suerte del principiante, porque me respondió que le apenaba, que le había emocionado mi relato y estaba dispuesto a publicarlo, quedando a mi disposición para futuras aventuras como autora. Vaya. Podría haber logrado presentar en una librería y ver apilados los ejemplares en un escaparate, después de todo.

No tengo nada en contra del comercio de las librerías, ni de las editoriales, ni de los grandes autores de éxito, ellos también venden en Amazon. Ya un amigo, me avisó de los lectores “anti-Amazon” y de que iba a perder oportunidades.

A pesar de que detesto el uso que se le está dando al “producto de proximidad” en la publicidad, y puesto que estoy de acuerdo con el señor Eudald Carbonell en que “la globalización es el mayor error de la historia humana”, me reafirmo en que soy una autora próxima; A mis compañeros del género teatral, de la danza incluso la elitista; a los estudiosos y expertos del tema; al público que disfrutó de las Variedades de los profesionales (ahora son gratuitas con los concursos de talentos) y a los ignorantes que nos insultaron “de oídas”, por ser mujeres libres sobre el escenario.

He defendido mi profesión y a parte de sus integrantes respetables, honestos y trabajadores hasta el límite de apuntar sobre las graves deficiencias en seguridad laboral como en la zona turística de costa. He defendido el derecho a trabajar y a crear empleo a pequeña escala con mis bailarines en Catalunya, principalmente. He defendido la creatividad y la vocación por encima de otros asuntos personales dejando atrás familia, amigos, ciudades e incluso abandonando España, para realizarme tal y como quería ser respetada y valorada.No voy a defenderme de cómo, cuándo y donde he publicado este legado personal y profesional de una trabajadora del espectáculo.

Cada etapa histórica, cada zona social, tiene el arte escénico y los artistas que se merece. Como los políticos.  Si no hay Varietés ni show comercial, ni revista musical es debido a que por mucho que aplauda, el público es voluble y tal como ama… olvida. Lo que era “glam” ahora es cutre. Lo que era antiguo ahora es ”fashion”. El público se mueve como una marea a capricho de las modas y de los “contenidos” de la televisión, de la política que impera en los Ayuntamientos y del fenómeno “viral” que no significa que algo sea mejor, sino más repetitivo y machacón, esa es la fama actual. Igual que les sucedió a muchas salas de cine y al video-club, con las plataformas en internet todo el entretenimiento se queda en casa, y el espectáculo directo se lo quedan unas productoras y/o agencias, que no responden cuando se les escribe o contestan que tienen sus propios proyectos a 3 años vista. 

Así que rebatiendo ese enunciado ridículo de que “los libros se compran en las librerías”… pregunto, solamente pregunto por los mercadillos como el del Mercat de Sant Antoni, los domingos en Barcelona. Pregunto por las editoriales y autores consagrados que venden on line. Pregunto por el beneficio que le queda a una persona como yo, que no es famosa escritora, ni famosa coreógrafa de los “dueños del cotarro visual de turno”. El tiempo no perdona y solo atiende a la inmediatez de las grandes promociones aunque la mayoría solamente sirvan para poner parches a los grandes agujeros que otros clavos han dejado en lo que es nuestra propia cultura. Por eso no sigo tradiciones.  Y por eso, menciono a Proust, aquel buenazo nostálgico propio de otra época que buscaba el tiempo perdido. Ya sabemos que en el Music hall, cualquier tiempo pasado sí que fue mejor. La suerte estuvo de nuestra parte pero nadie prometió que duraría siempre.

A ti que tanto criticas la venta on-line que también da empleo a operarios, transportistas y vendedores, esa venta que me permite encontrar sujetadores sin aro y sin relleno de determinada talla sin tener que exasperarme tras visitar 4 tiendas físicas, tan cercanas pero tan inútiles. A ti que no dudas en acudir al centro comercial “próximo” con «cajeros autoservicio» que sustituyen a personas, a comprar  productos “made in China” y “made in India” te digo que los libros se compran donde uno quiere siempre que le importe o interese quien los ha escrito. Que se leen en papel o en tableta/libro electrónico, y así lo han entendido las editoriales que como la Banca, siempre ganan.

Si la cultura no ocupa lugar tampoco se estipula que tenga que darse en determinado espacio.

Soy demasiado mayor para que me digan dónde vender o comprar algo que me ha salido de las entrañas en ese harakiri al escribir “Memorias de una Corista; Luces y sombras de las Varietés”. Demasiado joven para tragar con todo que se hace «lema» y casi doctrina hasta el aburrimiento. Dentro de 50 o 100 años, solamente quedará de mí ese libro en alguna estantería y con suerte el ejemplar digital pues a ello me pongo, otra maquetación, otro aprendizaje de supervivencia en Internet.

Me conformo (y mira que soy de poco conformar y menos resignarme). Me compensa.

Este libro ha sido número uno muchos días, en la sección de teatro y musicales, la Big data no miente, ahí están las capturas de pantalla junto a otras obras especializadas.

Gracias a las personas que me han comprado el libro, a quienes me acompañaron en la mesa y en la audiencia, a la apertura y disposición de las instituciones con las presentaciones realizadas en Barcelona y Cambrils, a la prensa y a los compañeros profesionales con sus reseñas que han sabido entender y apreciar este esfuerzo, confirmando esa seriedad por la que se me conoce. Seguiremos… soy accesible, reconocible e incluso amable, respetuosa y agradecida por naturaleza.

A pesar de la tristeza de que mi madre no pudiera contemplar esta realidad que fue dedicada a ella, ya tocaba una alegría…. ya tocaba.

Canciones de la Revista española

Estoy subiendo a youtube, los temas de los distintos repertorios desde 1983 hasta 1985 en mi paso por la compañía de Colsada. Estas canciones han sobrevivido en unos cassettes muy bien guardados y que poco a poco he ido digitalizando. Las revistas enteras forman parte de un DVD que entregué al MAE «Museo de las Artes Escénicas», dependiente del «Institut del Teatre» de la Diputación de Barcelona. También doné fotografías originales, algún programa, recorte de prensa e incluso póster teatral, que más vale que se queden allí a buen recaudo, que en una habitación donde rara vez entro, y menos aún, hojeo los álbumes.

Mi idea es subir todas las canciones que tengo, más que nada por ese gusto que manifiestan muchas personas hacia la revista musical española. Espero que disfrutéis del hallazgo que por ser analógico vale mucho más, incluso con las imperfecciones de las cintas. Esta es una lista de reproducción.